viernes, 23 de diciembre de 2011

Duele.

Crees que lo has olvidado todo, pero estás equivocada. Miras atrás y le observas feliz. Feliz con otra persona. Sin ti. Recuerdas los momentos que pasasteis juntos. Te emocionas. Sus ''te quiero'', sus besos apasionados parecían sinceros. El amor infinito e indestructible que decía sentir, nunca existió. Todo acabó hace mucho, pero aún duele su recuerdo hueco. Tal vez me quiso de verdad. Tal vez, yo le haya querido aún más. Tal vez, no haya sido tan importante para él. Tal vez, no fui nadie. Demasiadas dudas. Demasiados temores. Todo es parte del pasado. Pero sigue doliendo. El pasado, duele. Las promesas que nunca han llegado a cumplirse, las caricias falsas, las miradas vacías, los besos envenenados.. duelen. Ya no le quiero, pero le quise. Ya no me quiere, pero quiero creer que me quiso. Me duele, porque sé que me equivoco. Sé, que nunca llegó a quererme como yo a él. Sé que sus palabras, nunca fueron sinceras. Sé, que nunca será capaz de amar de verdad. Me compadezco de esa chica ahogada por sus besos. Tal vez le quiera. Puede que todavía más de lo que a mí me quiso. Pero sé que no es así, y por eso me duele. Sentir sus ojos enamorados, y ver en ellos, el reflejo de los míos. Sentir su boca ansiosa de su boca, y ver en ella la pasión que tuvimos. Sentir que me engañó, y que no voy a ser su única víctima. Hierba mala, nunca muere.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Llora.

Llora, porque has perdido a quien más quieres, y no porque hoy no puedas ver el sol.

No te quiero.

No te quiero. No te quiero. No te quiero.. Me repito a mí misma cada noche de mi vida. Quiero pensar que no te quiero. Quiero convencerme a mí misma de ello. Si no te quiero, todo es más fácil. No habrá sufrimiento. Te digo que no te quiero, y dejas de quererme. Te digo que no te quiero, y me engaño a mí misma. No te quiero. No te quiero. NO TE QUIERO. Lo pienso y se me ponen los vellos de punta. Me resulta imposible decirlo en voz alta. También me resulta imposible llegar a creerlo. Ojalá no te quisiera. Ojalá pudiera gritar a los cuatro vientos que no te quiero. Ojalá pudiera escuchar tu voz, y no temblar.. Me rindo. Es imposible. Pero.. ¿por qué quiero dejar de quererte? ¿Por qué me duele tanto sentir que te necesito de esta manera? ¿Por qué, intento mentirme y hacerme creer que lo que siento por ti, no es amor? A veces no logro entenderlo..

No te quiero. No te quiero.. NO, te quiero. Es mi única verdad. Que a pesar de los mil y un obstáculos que nos separan cada día, no he dejado de quererte ni un sólo segundo de mi vida. Esta vida, antes vacía y ahora plena por tu causa. ¿Ojalá no te quisiera? Si no te quisiera, moriría. Pero si te sigo queriendo, moriré de todas formas al no tenerte. Te quiero y no te tengo. Me muero sin ti. Cada día muero un poco más por no tenerte.

Sí te quiero. Y prefiero morir sin tenerte y haberte querido, a morir teniéndote y fingir que no te quiero.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Caminos.

Siempre hay un momento en el que el camino se bifurca. Cada uno toma
una dirección, pensando que al final los caminos se volverán a unir.
Desde tu camino, ves a la otra persona, cada vez más pequeña..

No pasa nada. Estamos hechos el uno para el otro. Al final estará ella..
Pero al final, sólo pasa una cosa.. llega el puto invierno.



Y de repente te das cuenta de que todo ha terminado.. de verdad.

Ya no hay vuelta atrás, lo sientes..
y justo entonces intentas recordar en qué momento comenzó todo..
y descubres, que todo empezó antes de lo que pensabas. Mucho antes.

Y es ahí, justo en ese momento, cuando te das cuenta de que las cosas sólo
ocurren una vez.. y por mucho que te esfuerces, ya nunca volverás a sentir lo mismo..

Ya nunca tendrás la sensación de estar a tres metros sobre el cielo.


Otro día más.

Intento mirar hacia otro lado y no darme cuenta de las cosas. Intento cerrar los ojos y pensar en lo que me gustaría hacer y que no hago. Intento evadirme de mis problemas soñando que algún día, podré conseguir mis metas. Pero por mucho que lo intente, nada puede hacerme volar hacia otro mundo que no sea este.

Otro día más de mi vida, sin saber qué hacer. Otro día más mirándome al espejo.. sintiendo las mismas dudas, los mismos temores, las mismas angustias. ¿Por qué todo sigue igual? ¿Por qué estoy atrapada en esta monotonía? ¡Todo es tan previsible!.. sé lo que me va a pasar desde que me levanto hasta que me acuesto. Aburrimiento. Hastío. Tedio. Desesperación. Dolor. Siento tantas cosas que lloro sin querer...

¡Qué difícil es a veces, ver el mundo pintado de colores.. ver ese gran arcoiris de felicidad.. sentir que algún día podrás salir de esa tormenta en la que todo se ve en blanco y negro!

Hoy.

Hoy he despertado de mi peor pesadilla
empapada en sudor y casi llorando..
me agarraba fuertemente a la cama mientras
pronunciaba tu nombre jadeando.

Estabas frío e inmóvil frente a mí,
y a mis palabras le hacías caso omiso,
¡qué trago tan amargo me tocó vivir!
la indiferencia del único hombre que me quiso.

Por suerte, pude salir de aquel infierno
que destruía y anulaba mi felicidad,
hoy he despertado en una mañana de invierno
al lado de mi fiel amiga: la soledad.

martes, 20 de diciembre de 2011

DIE.





Un dedo, y desaparecer. Ojalá todo fuera tan fácil.

Llorar.

Y a veces, te sientes tan sumamente sola y hundida, que lo único que puedes hacer, es llorar. Llorar desconsoladamente, como si por hacerlo, tus problemas se solucionaran. Pero aún así, lloras. Eres débil. Te sientes muy pequeña, en un mundo demasiado grande, que se encarga de aplastarte cada día un poco más. No puedes soportarlo. Sientes rabia. Rabia que se convierte en dolor. Dolor que acaba en llanto. Siempre acaba en llanto. Las lágrimas significan impotencia. Quieres que las cosas cambien, y por eso lloras. Pero hoy todo será distinto. A pesar de que el dolor me desgarre el alma, no voy a llorar. No voy a permitir que las lágrimas recorran mi cara, dejando unas cicatrices invisibles. No voy a llorar. No voy a llorar. NO VOY A LLORAR. Cuánto más me lo repito, más ganas me entran. ¿Qué puedo hacer? Lo único que puedo hacer, es dejarme llevar, y llorar un océano. Lloraré, pero no lo haré eternamente. En algún momento me cansaré de hacerlo, y me limpiaré las lágrimas con más fuerza que nunca. Puede que aunque no quiera, hoy llore, pero mañana ya no lo haré.

domingo, 18 de diciembre de 2011

sábado, 17 de diciembre de 2011

My shadows the only one that walks beside me.

Labios.

Porque los labios, no entienden de masculinos, ni de femeninos.

¿Por qué?

¿Por qué tengo que ser igual a los demás? ¿Por qué tengo que formar parte de un rebaño? ¿Por qué debo necesitar de otros para vivir? ¿Por qué no puedo ser independiente? ¿Por qué siempre tienen que hacer comparaciones odiosas? ¿Por qué cuestionan todos mis movimientos? ¿Por qué debo decir a dónde voy o con quién? ¿Por qué piden respeto, cuando no respetan? ¿Por qué tengo que callarme cuando me insultan? ¿Por qué se empeñan en amargarme la existencia? ¿Por qué hacer algo, supone un mar de críticas destructivas? ¿Por qué intentan hundirme con falsas acusaciones? ¿Por qué debo de dar explicaciones sobre mi vida? ¿Por qué no puedo tener personalidad propia? 


¿Por qué simplemente, no puedo ser diferente?

viernes, 16 de diciembre de 2011

Fácil.

Todo sería tan fácil contigo. .


Eres la única persona, capaz de hacerme olvidar todo lo malo, y recordarme cada día, lo bella que sería, una vida a tu lado. Sé, que sólo harías que llorara de felicidad.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Insincere.

Oscuridad.

Y en mi oscuridad espero, a que algún día con tu llegada, llenes mis días de luz.

Llamada.

Estás en tu cuarto, sola, cansada, asqueada de todo.. y entonces, oyes el teléfono.

-¡Que sea él, que sea él!

El ansia aumenta conforme van pasando los segundos. Segundos que parecen horas.
Horas que se agolpan y hacen que sientas incertidumbre e impaciencia, hasta el instante, en el que oyes tu nombre..

-Es para mí, pero seguro que no es él.

La distancia entre tu cuarto y el teléfono parece inmensa. Es como si nos separara un abismo. Pero lo cruzas, sin miedo a nada, porque albergas la esperanza de que al otro lado, esté la persona a la que amas..

-¿Sí?

Y en ese momento te das cuenta.

Las pupilas se dilatan, el corazón te va a mil por hora, te tiemblan las piernas. Sientes como una ligera brisa acariciando tu pelo y poníendote los vellos de punta. Notas cómo se te acelera la respiración y cómo fluye con fuerza la sangre por tus venas. Podrías jurar que estás escuchando música. Una música celestial. Una voz aterciopelada, que te hace adorar a Dios, por crear alguien tan perfecto.
Su voz.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Amistad.

A M I S T A D
Es más que una palabra.
Es más que un sentimiento.
Es más que una sensación.
Es más que una emoción.

La amistad, tiene nombre y apellidos.


 

Días.

Pasan los minutos. Las horas. Los 
días. Semanas eternas. Meses 
incontables. Se me escapa de las 
manos el tiempo. Va en mi contra. 
Te necesito, y no estás. Me
encantaría mirarte en silencio 
horas y horas. Adorar cada rincón 
de tu cuerpo, cada centímetro de tu 
piel. Admirarte a cada instante. 
Oírte respirar. Que tus latidos
se confundan con los míos. Quiero 
abrazarte. Quiero besarte. Que la
vida, tenga sentido a tu lado. Te quiero. Y pasan los días y no te tengo.
 

domingo, 11 de diciembre de 2011

Imaginar.

A veces, me gusta cerrar los ojos y pensar en ti. Imaginar tus pupilas brillantes mirándome con desconcierto. Tus dedos fríos, entrelazándose con los míos, anhelando un calor ferviente. Tu voz, entrecortada y temblorosa. Como si estuvieras nervioso por tenerme enfrente. Como si fueras un crío de primaria, que está a punto de recibir una sorpresa inesperada. Veo entusiasmo en tu mirada. Luz en tus ojos. Veo alegría. Amor. Me miras, y me derrito. Te acercas despacio, y dejo de respirar. Por un momento me olvido de que tengo pulmones, y el único oxígeno que tomo es el que sale de tu boca. Ya no estás nervioso, ahora lo estoy yo. Me altero al tenerte tan cerca, a escasos centímetros. Noto el calor de tu aliento rozándome los labios. Caliente. Húmedo. Tu boca irresistible me roza las mejillas entre susurros inaudibles. Mi corazón alborotado por tu causa, espera con ansia el momento clave. Un beso. Tu beso. El momento en el que se para el tiempo. El momento en el que me fundo contigo. El momento en el que te demuestro todo lo que me provocas. Me besas. Tu lengua mojada me llena la boca. Mis labios juegan con los tuyos. Entre jadeos incesantes te correspondo el beso con ternura, y a la vez con pasión. No puedo parar. Besarte es una adicción. Entonces, noto un soplo de aire helado. Has desaparecido. Abro los ojos. No estás. Nunca has estado.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Colores.

Ojalá, todo fuera diferente. El hastío cesara. Volviera a recordar qué es una sonrisa. Mi mundo gris se hundiera en la miseria. Ojalá estuvieras aquí para hacerme feliz, para conseguir que toque el cielo con la punta de mis dedos, para llenar mi vida de colores.

Traición.

Promesas. Palabras tan frágiles y débiles que se suspenden en el aire con un único fin, caer. Cuando lo hacen, el contacto con el suelo puede llegar a ser ensordecedor. ¡Qué ruido tan espantoso el de la mentira y la traición! Revienta los tímpanos y adormece el alma. Saber que no se cumplirán tus sueños, duele. Casi tanto, como saber que ello depende de alguien que te ha traicionado. Una traición, una puñalada. No hay mucha diferencia. Me dices que me quieres, y es mentira. Me clavas un puñal en el corazón y dejas que me desangre. Es exactamente lo mismo. Una traición, una herida. Dolor. Llanto. Soledad. Todo va unido. No contento con mentirme, te regodeas y metes el dedo en la llaga, en unas heridas visibles sólo ante tus ojos. La heridas que has provocado azotándome con tu hipocresía. Unas heridas todavía frescas. Aún palpitantes. Gotas de odio. Borbotones de venganza. Sangre. Mi interior, mi esencia.. mi todo, está destruído. Me estoy quedando vacía. Me estoy desangrando. Una traición, una cicatriz. Después de haber perdido litros de confianza, el resultado es una tumba viva. Un rincón desangelado en dónde reina el silencio, el vacío, la nada. Un lugar muerto, que jamás volverá a sanar. El dolor ha cesado, pero el lugar todavía anestesiado por tu puñalada, sigue recordándome cada día, tu traición. Una traición, una eternidad. Una cicatriz imborrable. Unas lágrimas infinitas. Una existencia arrasada por tu recuerdo hueco. Una promesa incumplida. Una mentira. Una mujer arruinada, sin alma, sin espíritu, sin fe. Décadas de sufrimiento invisible. Siglos de amargura punzante. Morir en vida. Vivir, estando muerta.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Preguntas.

¿Has sentido alguna vez esa sensación de adrenalina que te inunda los pulmones y te impide respirar? ¿Has notado cómo tu sistema nervioso se rinde antes su imagen, alterando desesperadamente tu ritmo cardíaco? ¿Has experimentado la satisfacción infinita que supone oir sus susurros entre respiraciones entrecortadas, y jadeos que son capaces de llevarte a la locura? ¿Has sido capaz de olvidar por un momento el lugar donde te encuentras, y pensar que no es la gravedad la que te sostiene, sino él? ¿Has soñado alguna vez en bucear hasta ahogarte en esos ojos profundos e inmensos? ¿Has llegado a suspirar de forma ensordecedora, al tocar el cielo con la punta de tus dedos? ¿Has cerrado los ojos, y has imaginado un mundo perfecto a su lado? ¿Has llegado a la conclusión, de que estás completa e irremediablemente enamorada?

Confesiones.

Sé que soy muy cerrada. Que me cuesta expresarme. Que me da mucha vergüenza.
Que te lo digo muy poco. Que tartamudeo sólo de pensarlo. Tengo que decirte algo
que siento. Algo que sientes. Que sabes. Que sabemos.

                                   ¡Te quiero!